Querétaro. Estudiantes de la Licenciatura en Diseño Industrial, de la Facultad de Ingeniería (FI) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), construyeron y donaron nueve bicicletas de equilibrio a niñas y niños de la Estancia Infantil Bienestar UAQ.
En un encuentro que combinó aprendizaje y diversión, los futuros diseñadores industriales compartieron su tiempo con los pequeños, enseñándoles el uso adecuado de las bicicletas y brindándoles conceptos básicos de cultura vial a través de dinámicas amenas y enriquecedoras.
La iniciativa, liderada por el Laboratorio de Movilidad Activa y la Coordinación de Sustentabilidad e Innovación Académica, en colaboración con la Dirección de Atención a la Comunidad Universitaria, mostró cómo la educación y la creatividad pueden converger para impulsar un cambio positivo en la sociedad desde temprana edad.
El gesto altruista no sólo se limitó a las bicicletas. La Coordinación de Emprendimiento y el Departamento de Gestión de Proyectos de la FI unieron esfuerzos para recolectar y entregar despensa a la Estancia, mostrando un compromiso integral con el bienestar de la comunidad.
Manuel Toledano Ayala, director de la Facultad de Ingeniería, expresó su entusiasmo por ver cómo el potencial creativo y el talento de los estudiantes se están utilizando en beneficio de la sociedad. «Estos proyectos nos invitan a repensar el futuro de la movilidad, contribuyendo a la formación integral de las niñas y los niños», destacó Toledano.
Por su parte, Froylán Correa Martínez, responsable del Laboratorio de Movilidad Activa UAQ, subrayó la importancia de considerar a los niños como agentes activos en las dinámicas urbanas. «Es fundamental otorgarles un papel relevante en sus desplazamientos y permitirles una autonomía guiada por el diálogo y el respeto a su visión única», puntualizó Correa.
La entrega de estas bicicletas de equilibrio no sólo fomenta un estilo de vida saludable desde la niñez, sino que también desencadena una conversación crucial sobre la movilidad sostenible, la seguridad vial y la responsabilidad ciudadana. La Universidad Autónoma de Querétaro da un ejemplo inspirador al liderar este proyecto que trasciende más allá de las aulas, dejando una huella positiva en la comunidad y sembrando las semillas del cambio para un futuro más sostenible.