Ciudad de México. Dos aviones de las aerolíneas Aeroméxico y Delta Airlines colisionaron en las calles de rodaje del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) la tarde del lunes. A través de su cuenta de Twitter, el AICM informó que el vuelo AM117 de Aeroméxico y el vuelo DL624 de Delta Airlines tuvieron un impacto entre la punta de ala de una y el estabilizador horizontal de la otra, en las calles de rodaje B y D, sin causar lesiones a ninguna persona.
El aeropuerto capitalino también informó que las autoridades correspondientes ya están investigando las causas del incidente. Posteriormente, Aeroméxico emitió un comunicado donde informó que el incidente no causó daños a los clientes ni colaboradores y que se cambió el avión para que los clientes continuaran su viaje. El incidente también fue reportado a las autoridades para su investigación.
Uno de los aviones afectados, la aeronave de la aerolínea Delta se dirigía a Nueva York, Estados Unidos.
La colisión entre aviones es un suceso poco común, pero grave, que puede poner en riesgo la seguridad de los pasajeros y el personal del aeropuerto. Es por ello que las autoridades aeroportuarias y las aerolíneas mantienen rigurosos protocolos de seguridad para prevenir este tipo de situaciones. A pesar de estos esfuerzos, aún pueden ocurrir accidentes, lo que destaca la importancia de que se realicen investigaciones exhaustivas para determinar las causas del percance y tomar medidas preventivas en el futuro.
Este tipo de acontecimientos también pueden generar retrasos y cancelaciones de vuelos, lo que puede afectar a los pasajeros y a la industria de la aviación en general. Es por eso que es importante que las autoridades, las aerolíneas y otros actores relevantes en la industria trabajen juntos para minimizar el impacto de estos accidentes en los pasajeros y en la economía en general.